La vitamina C (ácido ascórbico) es un potente antioxidante que protege la piel del daño causado por los agresores ambientales, tales como el sol y la contaminación. Es un efectivo tratamiento anti edad – particularmente porque estimula la producción de colágeno y ayuda a reparar los tejidos. También inhibe la producción de tirosinasa (la enzima que se encuentra en las células de la piel que producen melanina), es por eso que se le considera un ingrediente que proporciona brillo eficazmente y que se usa para tratar la hiperpigmentación. Nada mal para ser una sola vitamina, ¿no crees?
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EL QUE PREVIENE EL ENVEJECIMIENTO
Es probable que encuentres vitamina A en tus productos anti edad, bajo el nombre de retinol.
Este poderoso antioxidante es un ingrediente ¨mensajero celular¨, lo cual significa que se adhiere a las células de la piel y las hace comportarse como células jóvenes. Piénsalo como una batalla: el retinol en contra de los radicales libres. Mientras que los radicales libres hacen que las células de la piel se comporten como si fueran más viejas, la vitamina A, por el contrario, hace que las mismas células se comporten más rejuvenecidas. El resultado: piel más suave. Sólo existe un inconveniente: si tu piel se irrita fácilmente, tendrás que aplicarlo gradualmente.
EL QUE REPARA
La vitamina E (tocoferol) es un antioxidante que reduce el riesgo de daño causado por los radicales libres, particularmente por los rayos del sol. Esto es debido a que absorbe la energía de los rayos UV, combatiendo los efectos nocivos de los mismos, reflejados en forma de finas líneas de expresión y arrugas. Además de las propiedades anti envejecimiento, también fortalece la barrera de hidratación de la piel y actúa como un antiinflamatorio, siendo un tratamiento efectivo para combatir problemas como quemaduras y cicatrices.
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EL IDEAL PARA LOS ENROJECIMIENTOS
La vitamina B3 (niacina o niacinamida) aumenta la producción de ceramidas (el ¨pegamento¨ que mantiene unidas a las células de la superficie de la piel). Este proceso refuerza la función de la piel como una barrera, manteniendo la humectación ¨buena¨ dentro y los irritantes ¨malos¨ fuera. Su comportamiento parecido al de un escudo, lo convierte en un efectivo agente anti envejecimiento. La vitamina B3 también tiene propiedades antiinflamatorias, es por ello que se emplea frecuentemente para tratar el acné. Y debido a sus propiedades comunicativas celulares que hacen que las células produzcan más colágeno, es de igual forma, efectiva para tratar las marcas rojas que aparecen después de los brotes.
