Nada más entretenido que ver a los niños jugando felices en la playa. Lamentablemente, hay un riesgo importante para su salud. Los rayos UVA hacen más que gatillar la melanina que provoca el efecto bronceado. Estos afectan nuestro sistema inmune y especialmente el de los niños, incrementando el riesgo de cáncer de piel y envejecimiento prematuro. Los rayos UVB son los que crean la ‘quemazón’ rojiza en la capa más superficial de la piel. Aproximadamente un 80% de nuestra exposición a los rayos UV ocurre antes de los 18 años, por lo que la protección desde temprano es crucial.
Como buenas mamas preocupadas, le preguntamos a Holly Grenfell, experta en cuidados de la piel de Oriflame:
¿Qué es lo imprescindible para cuidar a los niños del sol?
– Una protector diseñado especialmente para ellos, con filtro UVA y UVB, gorros de alas anchas y si es posible, ropa con filtro UV.
¿Hay algo a lo que deberíamos prestar especial atención antes de salir?
– Aplicar el filtro 20 minutos antes de salir para que se absorba y colocar bastante, porque la mayoría de las veces aplicamos muy poco. No hay que olvidar áreas sensibles como las orejas, el dorso de las manos, rodillas y partidura del pelo.
¿Y una vez que están afuera?
– Evitar la exposición por periodos largos, especialmente entre las 10 y las 3 de la tarde; humectar la piel cada 45 minutos, con mayor frecuencia si están sudando o nadando y mantenerlos en la sombra lo más posible. Una quemadura se demora 12 horas en aparecer y puede ir empeorando.
¿Qué puedo hacer si mi hijo sufre quemaduras por el sol?
– Asegurarte de que estén en la sombra lo antes posible, darle una ducha con agua tibia- helada, humectar la piel con una crema y que beba mucha agua. Debes consultar a un dermatólogo si hay quemaduras o ampollas que cubran más del 20% del cuerpo o si tiene una fiebre que no baja o si el enrojecimiento de la piel no desaparece.
¿Qué importante tener presente?
– Que los rayos UV traspasan las nubes, por lo que necesitamos proteger a los niños estemos en el norte o cerca del Ecuador, puesto que en el norte los días son más largos y habrá exposición al sol por más tiempo. También hay que recordar que la acción del filtro decae después de un rato, por lo que hay que re-aplicar constantemente.