1. Sumerge tus pies en agua caliente
Si tus pies están adoloridos, llena una tina con agua caliente y sumérgelos por un tiempo. Puede ser un poco doloroso al principio – especialmente si tienes ampollas – pero el calor ayudará a aliviar los músculos cansados. Añade unas cuantas gotas de aceite de baño, te recomendamos los Aceites protectores 3 en 1 con Aceite de Oliva o con Aceite de Aguacate Orgánico de Love Nature y aplica después un gel calmante para piernas y pies cansados para un alivio extra.
2. Trata las ampollas
Cualquier herida abierta necesita atención inmediata: Siempre desinfecta antes de ponerte una banda adhesiva. Y resiste la tentación de reventar las ampollas; esa burbuja es en realidad, la forma en que tu cuerpo produce una cobertura natural para mantener limpia la piel que está debajo de ella.
3. Espera
La paciencia es probablemente la parte más frustrante de todo el proceso. Sabemos que existen lugares increíbles en los cuales quieres estar y zapatos hermosos que quisieras lucir. Pero únicamente vas a hacer más grande el problema si no esperas a que tus heridas sanen. Intenta dormir con una mascarilla para pies como la de Feet Up Advanced Mascarilla de Hidratación Intensiva para Pies – ¡así acelerarás el proceso de sanación!
4. Consiéntete con un pedicure
Tus pies pueden tener áreas ásperas – en los puntos en los que sufren mayor presión – que pueden cuartearse y volverse dolorosas. Usa una piedra pómez o una lima de pies para pulir cualquier callosidad y exfoliar (gentilmente) tus pies, después aplica una crema especializada para pies. Te recomendamos prestar atención especial en las puntas de tus pies y detrás de tus talones - ¡estas partes reciben mayor presión cuando usas tacones! Tómate un tiempo para desenterrar las uñas encarnadas o mal cortadas, pues suelen ser muy dolorosas.
5. Mantente descalza o con cómodos flats
Lo mejor es mantener tus pies intactos cuando tienes ampollas, hinchazón o dolor. Pasa algún tiempo descalza y usa un spray refrescante para Pies para refrescar tus pies cansados ¿Lista para salir? La clave está en elegir unos zapatos que no dañen tus pies y que hagan el menor contacto posible con tu piel.
6. Elige los mejores tacones para tus pies
¿Estás lista para salir por la noche? Elige un par de tacones que sean más respetuosos con tus pies. Cuando llevas zapatos que te aprietan o constriñen la forma natural de tu pie, sentirás más dolor. Usa taloneras suaves o elige un zapato con un tacón más grueso y más estable. Un tacón más grueso te proporcionará un mejor equilibrio y distribuirá el peso del pie de forma más uniforme.
Así que, después de seguir estos sencillos pasos, ¡esperamos que vuelvas a estar de pie y preparada para salir por la noche con unos tacones fabulosos!
