Lavar tu rostro puede parecer fácil pero… ¿Lo estás haciendo bien? Frota tu limpiador en gel sobre las palmas de tus manos, humedecidas previamente con agua. Comienza por aplicarlo sobre tu nariz. Usa tus dedos para masajear el producto en movimientos circulares sobre tus mejillas, frente y barbilla – esto removerá tu maquillaje y estimulará tu sistema linfático. Utiliza las yemas de tus dedos para cubrir desde los lugares más curvos de tu nariz, hasta el límite de tu frente con el cabello – no olvides enjuagar muy bien esta área para evitar la aparición de brotes causados por los rastros del limpiador. Enjuaga con agua tibia (no caliente), o utiliza una toallita para eliminar los restos de maquillaje, grasa y suciedad. ¡No olvides tu cuello! Aplica el limpiador hasta tus clavículas para mantener esta zona muy limpia.
LIMPIEZA PROFUNDA
Si vas a utilizar una herramienta de limpieza, comienza por humedecer y aplicar el limpiador sobre su cepillo-cabezal. Prende tu herramienta de limpieza y calcula invertir 20 segundos en el área de tu frente, 10 en cada mejilla y 20 a lo largo de tu mandíbula. Realiza movimientos circulares para que el limpiador penetre tu piel profundamente y para exfoliar tu rostro – puedes aplicar un poco más de presión en la Zona-T. Enjuaga la herramienta antes de tonificar.
TÓNICO
El segundo paso después de haber limpiado, es aplicar un tónico para obtener mejores resultados. Evita usar tónicos con alcohol que puedan irritar tu piel, causando resequedad o manchas – ¡pero no por eso descartes este paso! Aplica el tónico sobre un algodón y espárcelo sobre tu rostro, manteniéndolo lejos del área de tus ojos. Deja que se absorba antes de aplicar el siguiente producto.
CREMA DE OJOS
La delicada piel de alrededor de tus ojos requiere que apliques tu crema para ojos de la manera más suave y gentil posible, frotándola y dando ligeros toquecitos con tu dedo anular – sobre los huesos orbitales. Mantente alejada de la línea de crecimiento de tus pestañas, pues no querrás irritar tus ojos. Si tienes un producto con aplicador en roll-on, deslízalo debajo de tus ojos de exterior a interior, comenzando desde la parte de tu mejilla hacia la el puente de tu nariz.
Un excelente tip es dejar tu crema para ojos en el refrigerador durante toda la noche, pues así obtendrás un toque extra de frescura cuando lo apliques por las mañanas.
"SUERO
Aplica una pequeña cantidad (del tamaño de una almendra) de suero sobre la yema de tu dedo y presiona sobre tu rostro para estimular la circulación y fijar el producto. Cuando apliques suero en tu cuello, deslízalo sobre tu piel en movimientos de abajo hacia arriba – después no querrás que tu piel se "cuelgue" hacia abajo. Debido a la consistencia acuosa de los sueros, lo ideal es aplicarlos después de haber limpiado y tonificado, pero antes de hidratar. Deja que el suero se absorba y selle durante 10 segundos aproximadamente, antes de aplicar FPS o tu crema de noche.
CREMA DE NOCHE Y DE DÍA
Asegúrate de aplicar tus cremas de día y noche de manera uniforme, sobre tu rostro y cuello – evitando tirar de tu piel hacia abajo. Disfruta diario de un masaje facial, realizando pequeños movimientos circulares que empiecen sobre tu barbilla y se deslicen a lo largo de tu mandíbula, por los extremos de tu boca hacia tus orejas y desde los lóbulos de tu nariz hacia tu cien.