El color encendido de la gema más provocativa, el ágata, en combinación con detalles dorados, y el resplandor de los cristales hacen de este brazalete una tentación irresistible.

El ágata es una piedra conectada con la pasión. Esta preciosa gema abre la puerta al mundo donde los sueños se hacen realidad y se experimentan los deseos más secretos. Mantiene encendida la llama de la pasión por la vida o el trabajo, y también fortalece las relaciones familiares.