Científicos han descubierto qué tan importante es mantener nuestras bacterias intestinales en buen estado. Más del 80% de tus defensas están en nuestros intestinos, por lo que, nos debe de importar mucho mantenerlos sanos.
CONSTRUYE EL CAMINO
Al consumir fibra, te aseguras de incluir a millones de bacterias buenas en tu intestino. Estas son necesarias para una salud óptima, pues proveen nutrientes para el colon. Puedes obtenerla, agregando avena a tu desayuno, frambuesas a tus smoothies, o comer nueces y semillas en tus colaciones.
HAZ BUENOS ALIADOS
Hay una razón por la cual los probióticos (bacterias buenas) están en boca de todos, y es que estudios recientes sugieren que estos pueden afectar positivamente tu estado de ánimo, digestión y sistema inmunológico. Pero ¿en dónde puedes obtenerlos? Generalmente, se encuentran en alimentos fermentados como el kimchi, el miso, el chucrut, kéfir y el té kombucha. Si no te agrada el sabor, puedes usar un suplemento de probióticos en tus alimentos.
OLVIDA LAS DONAS
Lo sabemos. Darle la espalda al azúcar implica un esfuerzo enorme, sin embargo, este ingrediente, junto al alcohol y a los alimentos procesados, como las papas fritas y los refrescos, afectan a la flora intestinal y alimentan a las bacterias dañinas que se encuentran en los intestinos. ¡Esto significa que quizá tu merienda de medio día es la razón por la que te sientes desganado! Así que, para estar feliz y saludable, mantén al mínimo el consumo de alimentos procesados.